miércoles, 21 de febrero de 2018

¿POR QUÉ RECHINAMOS LOS DIENTES?...EL BRUXISMO



 El Bruxismo es el hábito de apretar o rechinar los dientes y se produce por el contacto de los dientes de la arcada superior e inferior cuando no es necesario, se produce por función masticatoria. Lo podemos clasificar en nocturno durante el sueño y por tanto involuntario, o diurno y semivoluntario.

Es un problema frecuente,  se estima que lo padece en torno al 5-20% de la población adulta y está causado por contactos dentarios prematuros, interferencias producidas por malposiciones, está relacionado con el estrés, algunas enfermedades del sistema nervioso y puede verse agravado por la ingesta de fármacos estimulantes.
 

El Bruxismo se manifiesta clínicamente con hipertrofia y dolor en los músculos masticatorios, sobre todo en los más potentes como el músculo temporal que produce dolor en la sien y el músculo masetero con molestias en la mandíbula, alteraciones de la función masticatoria y dolor y ruidos en la articulación temporomandibular.

Los desgastes dentarios representan un signo que con mucha frecuencia refieren los pacientes y facilita mucho el diagnóstico. Estos desgastes dentarios se suelen producir en primer lugar en los caninos superiores y puede llegar a ser de tal magnitud que altere la altura de la boca, lo que se conoce como pérdida de la dimensión vertical. Otra sintomatología propia del paciente bruxista es la hipersensibilidad a los cambios de temperatura y a la toma de algunos alimentos, sobre todo azucarados y es debida al desgaste dentario que puede llegar a dejar expuesto al exterior la parte más profunda de la dentina,  incluso la pulpa que es donde se encuentra el nervio o incluso romper restauraciones dentarias previas como coronas y puentes.

El tratamiento del Bruxismo pasa por la rehabilitación de las arcadas dentarias mediante tallados selectivos, prótesis o incluso ortodoncia, tratamiento de los aspectos psicológicos reduciendo el estrés, relajación muscular mediante fisioterapia y la utilización de férulas de relajación que reducen la sintomatología y las complicaciones.


Dr. Luis Prieto Lara-Barahona